Satanás ya fue descrito con anterioridad con estos tres nombres (12:9). Aprendamos sus significados:

1. Dragón. Este nombre nos recuerda una profecía: “Espanto serás” (Ez. 28:19), aunque hoy, los programas de T.V. que ven los niños se han encargado de reducir esto. Nombres paralelos: leviatán y behemot (Job 40:15-41:11).

2. Serpiente antigua. ¿Cómo era la serpiente antes de que fuera condenada a arrastrarse sobre la tierra (Gn. 3:14)? ¿Sería como los dinosaurios que desaparecieron del planeta? No importa, lo notable es que aquí también el niño está siendo cautivado por estos monstruos de la antigüedad.

3. Diablo. La palabra quiere decir acusador, mentiroso y malévolo. Nos relaciona con dos de sus principales tareas: acusar a los escogidos (12:10), y engañar a las naciones (20:10).

Estos nombres nos recuerdan que Satanás es poderoso, astuto y mal intencionado. No seamos seducidos, alucinados ni engañados por él.

• Tengamos presente que desde que Satanás entró en la historia, se nos presentó como un ser que ha sido derrotado por Jesucristo (Gn. 3:15; Jn. 16:11).

Lección: JESUCRISTO EL VERBO DE DIOS

Cuando pensamos en este nombre de Jesucristo, generalmente pensamos en su misión de manifestarnos la gracia de Dios (Jn. 1:1,14,17). En nuestra lectura para esta lección el nombre esta relacionado con “el lagar del vino de su furor y la ira del Dios Todopoderoso” (19:15).

En nuestro idioma, hay muchos verbos, y cada verbo está ligado con una acción que queda descrita en forma particular. Por ejemplo: ver, mirar, observar, son acciones de los ojos, pero cada verbo nos da una idea un poco diferente de esta acción.

Al pensar en “EL VERBO DE DIOS”, sólo hay un Verbo, y en él se describen todas las acciones de Dios. Desde las que nos hablan de su gracia hasta las que nos hablan de su ira. Es saludable tener presente esta verdad para que nos conduzcamos con temor durante toda nuestra peregrinación (1 P. 1:17).

Pensamiento: “le seguían”

Las visiones de 17:14 y 19:14 se relacionan con el mismo evento. Los “llamados y elegidos y fieles” son los mismos que vienen “vestidos de lino finísimo, blanco y limpio”. ¿Seguimos hoy a nuestro Señor con ropa que tiene las mismas cualidades?

“Lino finísimo” = Acciones justas de los santos (19:8).

“Blanco” = Así nos deja la sangre de Cristo (Is. 1:18).

“Limpio” = Así nos guarda el poder de Dios (Jd. 24).

LECCIÓN 9 | PÁGINA PRINCIPAL | LECCIÓN 11