Sigamos enumerando los pasos que notábamos ayer:
4. Resumir lo oído con fundamento en la Palabra (vs. 14-1814Simón ha contado cómo Dios visitó por primera vez a los gentiles, para tomar de ellos pueblo para su nombre. 15Y con esto concuerdan las palabras de los profetas, como está escrito: 16 Después de esto volveré Y reedificaré el tabernáculo de David, que está caído; Y repararé sus ruinas, Y lo volveré a levantar, 17 Para que el resto de los hombres busque al Señor, Y todos los gentiles, sobre los cuales es invocado mi nombre, 18 Dice el Señor, que hace conocer todo esto desde tiempos antiguos.). Jacobo habló en nombre del Espíritu quien le recordó un pasaje del profeta Amós (Am. 9:11,1211En aquel día yo levantaré el tabernáculo caído de David, y cerraré sus portillos y levantaré sus ruinas, y lo edificaré como en el tiempo pasado; 12para que aquellos sobre los cuales es invocado mi nombre posean el resto de Edom, y a todas las naciones, dice Jehová que hace esto.), pero antes de esto Jacobo lo tuvo que haber aprendido. No es necesario que un hombre se sepa toda la Biblia pero sí que, dentro de la Iglesia Local, cada quien sepa una parte diferente de manera que entre todos se conozca todo. Así el Espíritu podrá escoger de toda la Biblia el pasaje más adecuado para determinado momento.
5. Llegar a un acuerdo (v. 25nos ha parecido bien, habiendo llegado a un acuerdo, elegir varones y enviarlos a vosotros con nuestros amados Bernabé y Pablo). Esto debe ser por unanimidad, no por mayoría. Decide un cuerpo, no una organización.
6. Comunicar el acuerdo (v. 30Así, pues, los que fueron enviados descendieron a Antioquía, y reuniendo a la congregación, entregaron la carta). Esto no será tarea fácil, pues incluirá algunas verdades que podrán ofender, como: “a los cuales no dimos orden” (v. 24Por cuanto hemos oído que algunos que han salido de nosotros, a los cuales no dimos orden, os han inquietado con palabras, perturbando vuestras almas, mandando circuncidaros y guardar la ley).
7. Encargar la resolución del problema a hombres idóneos (vs. 27,32 27Así que enviamos a Judas y a Silas, los cuales también de palabra os harán saber lo mismo. 32Y Judas y Silas, como ellos también eran profetas, consolaron y confirmaron a los hermanos con abundancia de palabras. ). Esta es la parte más importante y que muchas veces se descuida.
Tres cosas por las cuales orar: el conocimiento de la Palabra, la conducción del Espíritu y la capacitación de los creyentes.