LA Biblia tiene mucho que decir sobre sí misma que es necesario entender y aplicar, para acabar con toda discusión.
1. ¿Cómo fue escrita?
· Porque nunca la profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo (2 P. 1:21porque nunca la profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo.).
Esto descarta que algún hombre haya escrito algo porque él quiso, y esto fue lo que buscaron los que seleccionaron los 66 libros de la Biblia que conocemos y usamos.
· Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia (2 Ti. 3:16Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia,).
Aquí corroboramos la universalidad del principio anterior. Fue el Espíritu quien inspiró a quien escribió el Libro de Job a que incluyera los argumentos erróneos de sus amigos, fue el Espíritu quien inspiró al cronista para que anotara tantos nombres y genealogías, fue el Espíritu quien inspiró a tantos escritores a escribir pasajes cuya inclusión es cuestionada.
2. ¿Qué es inspiración?
El poeta usa esta palabra para referirse a la persona, el lugar o el evento que lo motivó para escribir su poema, pero, en el contexto bíblico, hemos de entender esto de manera más profunda y completa, pero no
se ha de ir al otro extremo e interpretar la acción como el control total del individuo, a tal extremo, que anule toda su experiencia y su personalidad. El hecho que el Espíritu Santo no aniquila la personalidad de quien escribe, lo podemos constatar al observar, por un lado, las claras diferencias entre los escritos de, digamos, los apóstoles Pablo y Pedro, y por otro, al hecho de que los estilos literarios y las temáticas cubiertas varían de acuerdo con la pluma que Dios utilizó.
3. ¿Hay errores en este proceso?
En lo ya citado, así como en otras partes de las Escrituras, se establece que el Espíritu inspiró a santos hombres de Dios, es decir, Dios sólo usa a vasos santos, por lo tanto, hemos de creer que, por estar llenos de la plenitud del Espíritu, éstos no errarían en sus escritos, y aunque eran humanos falibles, con defectos y deficiencias, Dios guardaría su mente y su corazón para que sólo escribieran la verdad inerrante que él deseaba transmitir a sus criaturas.
Dejamos en sus manos el estudiar más este tema.
EL necio dice en su corazón que no hay Dios (Sal. 14:1Dice el necio en su corazón: No hay Dios. Se han corrompido, hacen obras abominables; No hay quien haga el bien.) y por tanto, dirá que no acepta que Dios le está hablando por medio de las Escrituras.