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Sirvo a mis hermanos

TEXTO PARA MEMORIZAR Santiago 5:16

“Confesaos vuestras ofensas unos a otros, y orad unos por otros, para que seáis sanados. La oración eficaz del justo puede mucho.”

INTRODUCCIÓN

Si pensamos en la Lección 10 sobre mostrar nuestra fe por las obras, veremos cómo se relacionan: confesión, oración y grandes resultados.

Si yo siento que alguien me ofendió, debo buscarlo; pero no debo ir pensando que yo no lo ofendí a él (3:2Porque todos ofendemos muchas veces. Si alguno no ofende en palabra, éste es varón perfecto, capaz también de refrenar todo el cuerpo.). Por eso la confesión es “unos a otros”.

Habiéndose escuchado las confesiones, debe seguir el perdón. Después del perdón, son las oraciones.

Orar por quien me ofendió, y orar con palabras sinceras y con fe, es la obra que demuestra que el perdón es real y verdadero. Muchas veces, los que se ofendieron y perdonaron vuelven a ofenderse, ¿será porque no oran los unos por los otros? Es decir, el perdón no tiene obras y está muerto.

El “justo” es el que ha confesado sus faltas, perdonado a su ofensor y orado por él. Después podrá orar por otras cosas y ser oído por Dios (Mt. 5:23,2423Por tanto, si traes tu ofrenda al altar, y allí te acuerdas de que tu hermano tiene algo contra ti, 24deja allí tu ofrenda delante del altar, y anda, reconcíliate primero con tu hermano, y entonces ven y presenta tu ofrenda.).

Si tus oraciones no son contestadas, piensa en cómo oras (5:16Confesaos vuestras ofensas unos a otros, y orad unos por otros, para que seáis sanados. La oración eficaz del justo puede mucho.) y para qué oras (4:3Pedís, y no recibís, porque pedís mal, para gastar en vuestros deleites. ).

LECCIÓN Santiago 5:2-20Ir a la Biblia en línea (sitio externo)

La Epístola de Santiago termina con muchas recomendaciones:

1. Sobre nuestra forma de hablar (v. 12Pero sobre todo, hermanos míos, no juréis, ni por el cielo, ni por la tierra, ni por ningún otro juramento; sino que vuestro sí sea sí, y vuestro no sea no, para que no caigáis en condenación.). El hombre interpone juramentos cuando piensa que un simple sí (o un no) no es suficiente. Vive de tal manera que acepten tu sí o tu no como verdad.

2. Sobre nuestras circunstancias (vs. 13-1513¿Está alguno entre vosotros afligido? Haga oración. ¿Está alguno alegre? Cante alabanzas. 14¿Está alguno enfermo entre vosotros? Llame a los ancianos de la iglesia, y oren por él, ungiéndole con aceite en el nombre del Señor. 15Y la oración de fe salvará al enfermo, y el Señor lo levantará; y si hubiere cometido pecados, le serán perdonados.). En la aflicción, aprendamos a orar, no a quejarnos (5:9Hermanos, no os quejéis unos contra otros, para que no seáis condenados; he aquí, el juez está delante de la puerta.). En la alegría, recurramos al canto (Col. 3:16La palabra de Cristo more en abundancia en vosotros, enseñándoos y exhortándoos unos a otros en toda sabiduría, cantando con gracia en vuestros corazones al Señor con salmos e himnos y cánticos espirituales.), no a disoluciones (5:5Habéis vivido en deleites sobre la tierra, y sido disolutos; habéis engordado vuestros corazones como en día de matanza. ).

3. Sobre la oración (vs. 16-2016Confesaos vuestras ofensas unos a otros, y orad unos por otros, para que seáis sanados. La oración eficaz del justo puede mucho. 17Elías era hombre sujeto a pasiones semejantes a las nuestras, y oró fervientemente para que no lloviese, y no llovió sobre la tierra por tres años y seis meses. 18Y otra vez oró, y el cielo dio lluvia, y la tierra produjo su fruto. 19Hermanos, si alguno de entre vosotros se ha extraviado de la verdad, y alguno le hace volver, 20sepa que el que haga volver al pecador del error de su camino, salvará de muerte un alma, y cubrirá multitud de pecados.). Debe ser eficaz (a quién se dirige y qué se pide) y de un justo. Debe ser ferviente (cómo la dirijo) y con fe (1:6Pero pida con fe, no dudando nada; porque el que duda es semejante a la onda del mar, que es arrastrada por el viento y echada de una parte a otra.). Uno de los propósitos debe ser la conversión del que se ha extraviado; esa fue la intención de la oración de Elías (v. 17Elías era hombre sujeto a pasiones semejantes a las nuestras, y oró fervientemente para que no lloviese, y no llovió sobre la tierra por tres años y seis meses.).

PENSAMIENTO Santiago 5:7-117Por tanto, hermanos, tened paciencia hasta la venida del Señor. Mirad cómo el labrador espera el precioso fruto de la tierra, aguardando con paciencia hasta que reciba la lluvia temprana y la tardía. 8Tened también vosotros paciencia, y afirmad vuestros corazones; porque la venida del Señor se acerca. 9Hermanos, no os quejéis unos contra otros, para que no seáis condenados; he aquí, el juez está delante de la puerta. 10Hermanos míos, tomad como ejemplo de aflicción y de paciencia a los profetas que hablaron en nombre del Señor. 11He aquí, tenemos por bienaventurados a los que sufren. Habéis oído de la paciencia de Job, y habéis visto el fin del Señor, que el Señor es muy misericordioso y compasivo.

La paciencia es otro tema que se repite en esta epístola. Se nos recomienda ejercerla:

a) Para que seamos perfectos y cabales (1:3,4 3sabiendo que la prueba de vuestra fe produce paciencia. 4Mas tenga la paciencia su obra completa, para que seáis perfectos y cabales, sin que os falte cosa alguna.).

b) Hasta que lleguen las lluvias (5:7Por tanto, hermanos, tened paciencia hasta la venida del Señor. Mirad cómo el labrador espera el precioso fruto de la tierra, aguardando con paciencia hasta que reciba la lluvia temprana y la tardía.).

c) Porque la venida del Señor se acerca (5:8Tened también vosotros paciencia, y afirmad vuestros corazones; porque la venida del Señor se acerca.).

d) Porque hay una bienaventuranza (5:10,1110Hermanos míos, tomad como ejemplo de aflicción y de paciencia a los profetas que hablaron en nombre del Señor. 11He aquí, tenemos por bienaventurados a los que sufren. Habéis oído de la paciencia de Job, y habéis visto el fin del Señor, que el Señor es muy misericordioso y compasivo.).

¿Te interesas así por tu hermano?

 

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