“Así perezcan todos tus enemigos, oh Jehová; mas los que te aman, sean como el sol cuando sale en su fuerza. Y la tierra reposó cuarenta años.”
Amar o aborrecer es la única alternativa delante de Dios (Stg. 4:4¡Oh almas adúlteras! ¿No sabéis que la amistad del mundo es enemistad contra Dios? Cualquiera, pues, que quiera ser amigo del mundo, se constituye enemigo de Dios. ; 1 Jn. 2:15No améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él. ). ¡No hay puntos intermedios!
El cántico de Débora (Jue. 5:1-31Ir a la Biblia en línea) señala algunas acciones de los que aman a Jehová. Anótalas:
También presenta muchas formas de ser de los enemigos de Dios. Anota algunas de ellas:
¿Entiendes qué significa cada frase que anotaste?
AMIGO DE DIOS -- ENEMIGO DE DIOS
¿Qué dicen tus acciones?
Porque el hombre escogió conocer “el bien y el mal” (Gn. 3:5,75sino que sabe Dios que el día que comáis de él, serán abiertos vuestros ojos, y seréis como Dios, sabiendo el bien y el mal. 7Entonces fueron abiertos los ojos de ambos, y conocieron que estaban desnudos; entonces cosieron hojas de higuera, y se hicieron delantales.), Dios nos ha rodeado de muchas circunstancias que demandan una decisión, es decir, ha puesto delante de nosotros “la vida y la muerte” (Dt. 30:19,2019A los cielos y a la tierra llamo por testigos hoy contra vosotros, que os he puesto delante la vida y la muerte, la bendición y la maldición; escoge, pues, la vida, para que vivas tú y tu descendencia; 20amando a Jehová tu Dios, atendiendo a su voz, y siguiéndole a él; porque él es vida para ti, y prolongación de tus días; a fin de que habites sobre la tierra que juró Jehová a tus padres, Abraham, Isaac y Jacob, que les había de dar.).
Ante la necesidad de decidir, la historia marca que hay tres casos muy marcados:
a) Cuando se tomó una mala decisión, y se llegó al fracaso.
b) Cuando se dedicaron a investigar, planear o discutir, pero nunca llegaron a un acuerdo, y por tanto les sobrevino una desgracia.
c) Cuando se tomó una buena decisión, y todo salió bien.
Sin embargo, para Dios, sólo hay dos casos:
a) Los que deciden obedecer a Dios, y por tanto, reciben su bendición, y todo sale bien.
b) Los que deciden no obedecer a Dios, por cualquier causa como obstinación, indecisión o miedo, y por tanto, caen bajo maldición y sus vidas están llenas de fracasos.
La decisión se basa en una observación sencilla: ¿creemos o dudamos lo que Dios nos dice? Tenemos tres ejemplos de esto:
1. Débora, que creyó a Dios, y le sirvió sin temor.
2. Barac, que necesitó de la ayuda de Débora para creer a Dios y obedecer a su llamado.
3. Los de Rubén que sólo hicieron “grandes propósitos del corazón” (5:16¿Por qué te quedaste entre los rediles, Para oír los balidos de los rebaños? Entre las familias de Rubén Hubo grandes propósitos del corazón.), pero no obedecieron a Dios.
El que sigue al Señor, no tendrá la comodidad de una cama, la seguridad de una herencia ni la amistad de sus antiguos compañeros. Pero sí, las bendiciones de Dios.