CARACTERÍSTICAS
DEL SALMO 119

No sólo es el salmo más extenso (176 versículos), también es uno de los más interesantes. Consta de 22 estrofas, cada una con 8 versículos o versos. Cada versículo de la primera estrofa empieza con la letra alef; los de la segunda con bet, y así sucesivamente hasta agotar el alfabeto hebreo.

Por supuesto, esto no es evidente en español, pero el mensaje del salmo está al alcance de cualquier ser humano sea cual fuere su idioma.

El énfasis en las 22 letras nos puede sugerir que la perfección de la Palabra de Dios agota las posibilidades del lenguaje humano. Lo mismo podemos decir de la persona de nuestro Salvador, pues uno de sus títulos es “el Alfa y la Omega” (Ap. 1:8Yo soy el Alfa y la Omega, principio y fin, dice el Señor, el que es y que era y que ha de venir, el Todopoderoso.).

Llámese Alef-Tau, Alfa y Omega, alfabeto o abecedario, el Espíritu Santo nos quiere enseñar en este salmo que la función principal del idioma es comunicar al hombre con Dios. En segundo lugar queda la comunicación del hombre con el hombre.

Usemos el alfabeto para comprender lo que Dios nos quiere decir y para hablar con él y de él.

Hay diez nombres en este salmo para la ley de Dios. Busquémoslos. La Biblia se menciona en 172 de los 176 versículos de este salmo.

“El Sembrador”
La Semilla es la Palabra de Dios
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