INTRODUCCIÓN AL LIBRO DE LOS HECHOS DE LOS APÓSTOLES

LAS palabras iniciales de este libro son suficientes para respaldar varias verdades que nos ayudarán a entenderlo y a aprovechar sus enseñanzas.

¿Quién lo escribió?

Lucas, el compañero de viajes del apóstol Pablo, el “médico amado” (Col 4:14Os saluda Lucas el médico amado, y Demas.), el que se propuso investigar desde un principio lo que escribió en su primer tratado, el Evangelio según San Lucas, y el que escribió este libro son el mismo personaje.

¿A quién fue dirigido?

Poco se sabe del “excelentísimo Teófilo” (Lc. 1:3me ha parecido también a mí, después de haber investigado con diligencia todas las cosas desde su origen, escribírtelas por orden, oh excelentísimo Teófilo), pero es de suponerse que es el mismo que recibe el primer tratado. Algunos sugieren que, al igual que Juan en su segunda epístola, Lucas está usando un nombre o personaje figurado (2 Jn. 1,131El anciano a la señora elegida y a sus hijos, a quienes yo amo en la verdad; y no sólo yo, sino también todos los que han conocido la verdad 13Los hijos de tu hermana, la elegida, te saludan. Amén.). Teófilo significa “amigo de Dios” o “amado de Dios” y este nombre describe a cada uno de aquellos que han sido justificados por la sangre de Cristo.

¿Cuál fue su objetivo?

Si le damos cierto peso a las palabras: “Las cosas que Jesús comenzó a hacer y a enseñar” (1:1En el primer tratado, oh Teófilo, hablé acerca de todas las cosas que Jesús comenzó a hacer y a enseñar,), particularmente a: “comenzó”, que puede ser una referencia al Evangelio según San Lucas, podemos deducir que en este segundo tratado escribiría y trataría de poner en orden las cosas que el Señor continuó haciendo y enseñando, ya no en persona, pero sí a través de sus discípulos que serían guiados e impulsados por el poder del Espíritu Santo. Con base en esto, muchos proponen que el título del libro debiera ser: LOS HECHOS DEL ESPÍRITU SANTO.

Con esto en mente podemos dividir este libro histórico en cuatro partes que, hasta cierto punto, son obvias.

1. El Espíritu Santo y la Iglesia.

Los discípulos del Señor reciben el poder del Espíritu Santo y la iglesia de Dios toma forma visible. El trabajo específico del Espíritu Santo en esta sección es el de corregir e instruir.

2. El Espíritu Santo y los Creyentes.

En esta sección se destacan las conversiones del etíope, de Cornelio y de Saulo de Tarso, y vemos al Espíritu Santo eligiendo a unos para que reciban el mensaje, e impulsando a otros para que lo lleven.

3. El Espíritu Santo y el Apóstol.

Las dos últimas secciones son biográficas. Ésta narra el ministerio del apóstol Pablo y notamos cómo el Espíritu Santo lo conduce a cumplir con la vocación a la que había sido llamado.

4. El Espíritu Santo y el Hombre.

Las notas biográficas de esta sección son más íntimas y personales y hacen sobresalir cómo el Espíritu Santo cuida a los que son hijos de Dios.

Como bosquejo de estas cuatro secciones tenemos lo siguiente:

EL ESPÍRITU SANTO PROPORCIONANDO:

1. PRINCIPIOS PARA EL PROGRESO 1:1- 7:60Ir a la Biblia en línea (sitio externo)

2. PLANES PARA LAS PERSONAS 8:1-12:25Ir a la Biblia en línea (sitio externo)

3. PODER EN LA PALABRA 13:1-20:38Ir a la Biblia en línea (sitio externo)

4. PROTECCIÓN EN EL PELIGRO 21:1-28:31Ir a la Biblia en línea (sitio externo)

“El Sembrador”
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