Agosto 17

2 Crónicas 20:1-37Ir a la Biblia en línea (sitio externo)

“NO SABEMOS QUÉ HACER”

Esto es lo que dijo Josafat en otra de las grandes oraciones registradas en los Libros de Crónicas (v. 12¡Oh Dios nuestro! ¿no los juzgarás tú? Porque en nosotros no hay fuerza contra tan grande multitud que viene contra nosotros; no sabemos qué hacer, y a ti volvemos nuestros ojos.).

La escena ahora es distinta. Ayer leímos de paz y de una gran obra de reconstrucción. Hoy, hay amenaza de guerra porque la buena conducta produce envidia y enojo en las naciones vecinas. Así sucede en la actualidad porque también hoy “todos los que quieren vivir piadosamente en Cristo Jesús padecerán persecución” (2 Ti. 3:12Y también todos los que quieren vivir piadosamente en Cristo Jesús padecerán persecución).

A pesar de lo que dijo Josafat, sí sabía lo que debía hacer porque a renglón seguido dice: “A ti volvemos nuestros ojos” (v. 12¡Oh Dios nuestro! ¿no los juzgarás tú? Porque en nosotros no hay fuerza contra tan grande multitud que viene contra nosotros; no sabemos qué hacer, y a ti volvemos nuestros ojos.). En momentos difíciles recordemos que nuestro refugio está en Dios y acerquémonos a él con humilde súplica y con fe en sus promesas.

Dios responde a la oración del descendiente de Abraham su amigo (v. 7Dios nuestro, ¿no echaste tú los moradores de esta tierra delante de tu pueblo Israel, y la diste a la descendencia de Abraham tu amigo para siempre?) y da instrucciones precisas para la batalla. A la mañana siguiente hay obediencia y una gran victoria: vieron la salvación de Jehová (v. 27Y todo Judá y los de Jerusalén, y Josafat a la cabeza de ellos, volvieron para regresar a Jerusalén gozosos, porque Jehová les había dado gozo librándolos de sus enemigos.). Y esto se recibe con reverente gratitud (vs. 18,1918Entonces Josafat se inclinó rostro a tierra, y asimismo todo Judá y los moradores de Jerusalén se postraron delante de Jehová, y adoraron a Jehová. 19Y se levantaron los levitas de los hijos de Coat y de los hijos de Coré, para alabar a Jehová el Dios de Israel con fuerte y alta voz.).

Hay mucho en la vida del rey Josafat que debemos imitar.

“El Sembrador”
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